que se acumula
en vidas llenas de experiencias,
con las nubes negras del atardecer
reflejo de la vida dura y cansada,
infatigable de belleza ciega.
Blandiendo las alas de la imaginación
en un mundo inmaterial
donde el tiempo no existe,
solo el amor...
Venciendo la deshora y garabateando la emoción
de sentirte de nuevo...
Lidiando entre tornados de fuego,
saliendo ilesa de esas llamas que no calientan.
Deseo escudriñar tu esencia
y bebérmela a sorbos calientes
de enredada certeza.
Manipular tu alma abierta,
para meterme dentro,
y coserla con costuras que no duelan,
pero que nunca se rompan,
que sean...eternas.
Myriam Cobos
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