Hay una inspiración del alma cuando te veo
y mi corazón sonríe, y se para el tiempo.
Cuando tus ojos se cruzan con los míos
dos rayos invisibles se disparan,
y las pupilas se preparan
para un dulce encuentro.
para un dulce encuentro.
La voz se para, las palabras sobran,
nuestros ojos hablarán por siempre
el idioma de los sueños.
Myriam Cobos
No hay comentarios:
Publicar un comentario