Soy escritora desde que nací...
Nada más nacer,
ya quise escribir una historia,
como no tenía lápiz y papel,
utilicé mis dedos y mi cara.
Quería dejar constancia de algo imborrable,
que el tiempo no se llevara,
y lloré de impotencia,
clavándome las uñas en la cara.
La escritura es una forma de alargar nuestra existencia
a través del tiempo, a través de la Eternidad,
una manera de dejar huella
y no morir jamás.
Aún llevo esas marcas
en mi rostro,
esa expresión de sentimiento callada,
esos poemas que aún
no podía plasmar en el papel,
y quedaron para siempre como cicatrices en la cara.
Soy escritora desde que nací,
dejé la huella impresa de esa historia,
de mi historia, de las demás vidas,
de las demás historias.
En la cuna ya inventaba cuentos,
observando con pasión
las sabanitas con figuras
por mi madre bordadas,
fieles compañeras de mis sueños.
Aún recuerdo ese tiempo en soledad,
entre barrotes,
ese tiempo que pasaba con sus personajes…
el lobo, el pollito, la casa…el enanito...
¡Aún las conservo!
Soy escritora desde nací,
y me marqué la cara…
para recordarlo siempre,
para que nunca…
se me olvidara.
Myriam Cobos
Me ha gustado mucho, Myriam. Enhorabuena. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias estimado Alfredo Cernuda, realmente es para mí lo más íntimo y personal que he publicado, incluso confieso, que sentí algo de pudor al hacerlo...porque es algo muy privado e íntimo de mi más tierna historia...Me alegra muchísimo que te haya gustado. Un fuerte abrazo
EliminarSin duda eres una excelente escritora y poetisa.
ResponderEliminar¡Felicidades y gracias por compartir con nosotros tu arte, con el que deleitarnos!
Un abrazo
Muchas gracias estimado Jose Luis Giménez, es un gran honor el que me haces con tus palabras viniendo de un gran escritor y poeta como tu lo eres. Me alegro mucho que te haya gustado.
ResponderEliminarUn gran abrazo