para apartarse a solas y
que nadie nunca conocerá.
Palabras hermosas de cariño y de deseo,
roce de manos frágiles como el cristal.
La luna los vigila desde cerca
arropando su amor desbordado
con su belleza eterna.
Envueltos en la noche,
sentados en un banco del jardín,
soñaban fantasías extasiantes,
sellando su amor con un ardiente
beso que no tenía fin.
Myriam Cobos
LE ESCRIBES A LOS ENAMORADOS SOLITARIOS, AQUELLOS QUE SELLAN SU DESEOS CON UN BESO. AQUELLOS QUE SE JURAN AMOR ETERNO, ME PARECE MUY BELLO, CREO SI LOS BANCOS DE UN PARQUE HABLARAN, NOS CONTARÍAN BELLAS HISTORIAS DE AMOR Y OTRAS QUE NO LO FUERON TANTO, PERO SON UNOS GRANDES CONFIDENTES ESCONDIDOS BAJO UN ÁRBOL.... FELICIDADES AMIGA.
ResponderEliminarMuchas gracias Ruth
ResponderEliminarMe alegro que te guste
Un abrazo